Recuerdo que estos zapatos los compré en uno de estos malls de Nueva York, en los que las grandes tiendas de diseñadores tienen sus saldos, haciendo relativamente accesibles sus diseños a personas comunes y silvestres.
Cuando los vi, fue amor a primera vista, tenía que tenerlos. Siendo honesta comprarlos no fue fácil, el precio no era el mejor y había un par de personas a las que debía convencer además de mi, pero dicen por ahí que "querer es poder". Estaban en dos colores, pero para mi no hay nada más atractivo que un par de zapatos negros (ya tengo muchos, y los seguiría comprando). Lo que me gusta de ellos es que son la mezcla exacta: no sencillos, pero si simples y elegantes. Son perfectos para blue jeans en un día en que te sientas más lady, pero también para aquellas ocasiones en las que debes estar un poco más formal.
Bottega Veneta
PD: Espero que les guste también esta nueva sección.
