Hace mucho tiempo que no iba a darme una vuelta por el Museo Nacional de Bellas Artes, pero hace ya un par de semanas -pasa muy rápido el tiempo- tuve la oportunidad de ir a a la exposición Arte en Vivo, donde no sólo expuso una amiga, sino que además ganó el concurso, pero esa es ya otra historia.
Estando en el museo me pude dar cuenta que si bien las salas de exposición están en buen estado y bien decoradas, con una buena elección de colores y juego de luces para así destacar los cuadros, es el Hall Central el que deja harto que desear.
Falta cuidado, probablemente se debe a problemas de presupuesto, pues aun quedan estragos del terremoto, y ciertamente los vidrios de la cúpula, no sólo necesitan limpieza sino también unificación, pues se nota la diferencia entre cada uno de ellos; diferencia de calidad, de colores.
Sin embargo no hay excusa de falta de dinero para que pinten las entradas a las galerías de color damasco, y el resto de las paredes del hall de color crema. Simplemente no se, como un lugar que es siempre visitado por artista, que cuyo director es un artista, tiene esa combinación de colores en el hall del Museo de Bellas Artes. Pobre decisión de colores.
Damasco. El color en si no es feo. Aunque por lo menos a mi NUNCA me ha gustado en las paredes. ¿Qué tal les parece a ustedes?
